Los antibióticos son una piedra angular de la medicina moderna y la salud pública. Su importancia para la salud humana y animal no puede subestimarse, por lo que la resistencia a los antimicrobianos (RAM) es una amenaza global tan importante. Cuando las bacterias desarrollan tolerancia o resistencia a los antibióticos, corremos el riesgo de volver a una época en la que los animales (y las personas) enfermaban gravemente o incluso morían a causa de infecciones simples y tratables. TAGS: Antibióticos. Resistencia a los antibióticos. Medicina moderna. Salud pública. Salud humana. Salud animal. Una Salud. One Health
Los antibióticos son la única forma de tratar una enfermedad bacteriana. Actualmente no existe ninguna alternativa.
Como productores de medicamentos y otros productos sanitarios para animales, nuestra industria proporciona a los veterinarios las herramientas necesarias para gestionar las enfermedades animales. Reducir el uso de antibióticos sin abordar primero las tasas de enfermedades significaría que los animales enfermos quedarían sin tratamiento, lo que causaría un sufrimiento y una mortalidad innecesarios, además de aumentar el riesgo de transmisión a otros animales y personas.
Sin embargo, podemos aprovechar todo el espectro de herramientas de salud animal para reducir la necesidad de antibióticos.
Si protegemos mejor a los animales de la amenaza de enfermedades, identificamos los problemas de salud de forma temprana y los tratamos de manera rápida y responsable, podemos reducir los niveles de enfermedades y, con ello, la necesidad de antibióticos. Para ello es necesario maximizar los beneficios preventivos y a largo plazo para la salud de herramientas como la vacunación, la nutrición, los antiparasitarios, la bioseguridad, la vigilancia de enfermedades, los diagnósticos, la cría y otras tecnologías de salud animal.
En conjunto, estas herramientas pueden mejorar la prevención, la detección y el tratamiento de las enfermedades animales. Esta es nuestra hoja de ruta para reducir la necesidad de antibióticos.
La capacidad de gestionar y controlar las enfermedades animales tiene profundas consecuencias para la salud y el desarrollo humanos, desde garantizar la seguridad de la carne, la leche, el pescado y los huevos hasta reducir el riesgo de que las personas contraigan enfermedades bacterianas transmitidas por los animales. Y aunque la relación entre el uso de antibióticos en animales y los crecientes niveles de resistencia en las personas sigue siendo compleja y no se comprende bien, la resistencia a los antimicrobianos nos afecta a todos.
Nuestra industria ha trabajado en este desafío durante muchos años, y nuestro Compromiso con los Antibióticos de 2017 definió nuestros principios básicos para abordar la RAM. Las actividades que hemos llevado a cabo en línea con estos principios se pueden ver en la Sección Cinco de esta Hoja de Ruta. Pero vemos más oportunidades para reducir la necesidad de antibióticos y, al mismo tiempo, mejorar la salud animal.
Acceder a la guía en archivo adjunto.
Fuente: https://healthforanimals.org/
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